Merlina era especial en muchas formas, era la única cuyos sueños no podían ser leídos por Sariel. Y él se extrañaba por eso.
Merlina y el Diablito
Gerardo Sifuentes
Para quienes alguna vez amaron tanto que vomitaron su alma. Para quien alguna vez me amó que me regaló la suya. Para quien he de amar en un futuro. Para mi misma, dejo estos pedazos de mi.... con la mirada perdida y mi cuerpo desangrado.
3 comentarios:
y el diablo le dijo…
Merlina:
pideme lo que desees…
Bellísima imágen.
Merlina soñaba despierta,
ése era su secreto.
Despierta, dormida...Sariel solo una vez pudo saborear los sueños de Merlina y desde entonces supo que su niña era una bruja de las imagenes...como tu! jaja
Gracias por visitar mi rincón y si la imagen es bella aunque me gustaría que me enviaras una tuya para ponerla entre mis Nítidos Placeres.
Saludos amiga Dahlia!!
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